Trajano y Adriano escapando por la ventana en el terremoto de Antioquía (año 115 d.C)

Catástrofes del Hoy
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Trajano y Adriano escapando por la ventana en el terremoto de Antioquía (año 115 d.C)

Vía www.labrujulaverde.com –

El 13 de diciembre del año 115 d.C. pudo cambiar completamente el curso de la historia del Imperio Romano. Ese día hubo un terremoto en la ciudad de Antioquía del Orontes (hoy Antakya en la costa sureste de Turquía), cuya intensidad máxima en la escala de Mercalli se ha estimado como XI o extrema. Ese día, atrapados en medio del terremoto, estaban allí el emperador Trajano y su sucesor Adriano.

En la escala de magnitud de ondas de superficie alcanzó un 7,5 y la ciudad quedó prácticamente destruida, y con ella la mayor avenida columnada de la Antigüedad que tenía nada menos que 2 kilómetros y 275 metros de longitud flanqueando el cardo de la urbe.

La ciudad, en aquel momento, estaba repleta de tropas romanas, pero también de muchos civiles, debido a que Trajano estaba invernando allí, preparándose para culminar su guerra contra los partos, recién llegado de una campaña en Armenia, y la corte imperial le acompañaba. Adriano se encontraba en Antioquía desde enero de 114 d.C., ciudad en la que había fijado su residencia como legado imperial.

A pesar de que tanto Trajano como Adriano pudieron escapar solo con heridas leves, no tuvo tanta suerte el cónsul Marco Pedón Vergiliano, que resultó muerto.

Todo comenzó en las primeras horas de la mañana, con un gran estruendo, mientras la mayoría de los habitantes de Antioquía estaban todavía durmiendo, incluyendo posiblemente al emperador. Quienes se encontraban al aire libre pudieron sentir inmediatamente una violenta sacudida, y vieron como los árboles eran súbitamente arrancados y derribados, mientras todo comenzaba a temblar con gran fuerza.

Trajano, al que posiblemente despertó el estruendo inicial, tuvo el tiempo justo para salir por una ventana de la habitación de su dormitorio cuando las paredes y el techo ya comenzaban a colapsar bajo las embestidas del terremoto, sufriendo heridas en la caída.

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